13 marzo 2012

Compartir cama

Y esta soy yo, perdida en cada recoveco de tu piel, sumergida en cada esquina de tu cuerpo, buscando a tientas tu sexo, siguiendo tu mirada en la oscuridad de esta habitación...
Los movimientos acompasados de nuestros cuerpos nos automatizan, la fricción de nuestra piel nos humaniza, la oscuridad nos revela, nos desvela más humanos y reales que nunca.
Toda nuestra realidad cuelga con pinzas sobre nuestras cabezas. Más allá del pudor del desconocimiento, está la confianza del tiempo consumido juntos. Más allá del miedo se encuentra la verdad de que, para compartir la cama con otra persona, prefiero no compartirla. Y quizá, sólo quizá, soñar contigo.

2 susurros:

.A dijo...

si no es a ti .. pues a nadie

lunáticasuicida dijo...

Me gusta eso de soñar, y también volar.
:)

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